3/24/2010

Detalles


Cuando le presentarón a su nueva compañera de trabajo, como siempre, él se enamoro al instante.
Tras mucho insistir, ella accedió a una cita.
El se esmeró en todos los detalles: rosas, champagne, fresas, luz tenue, música suave…
La noche estaba siendo increíble.
En el momento más íntimo de la velada él la llamó por el nombre de su ex mujer.

©Miguel Urda

4 comentarios:

T.M. dijo...

Tantos preparativos...para al final fastidiarlo. Aunque tampoco se debería dar tanta importancia a estos detalles, es lógico si se ha compartido mucho tiempo con una persona, y tendríamos que ser más tolerantes con estas meteduras de pata. Si se repiten mucho...la cosa cambia, jejeje.
Saludos.

Loli Pérez dijo...

Lo que pueden arruinar unas simples palabras pronunciadas en el momento menos indicado...

Buen Micro, Miguel

B7s
L;)

Alforte dijo...

OOOOPPPSSSSS desliz! ;-) El subconsciente juega malas pasadas.
Bsote

José Guadalupe dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.